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Advertencias para los confesores de los naturales (Primera parte)
M. Ocharte, 1600.
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Los Oontetlores. tod
ç O.ra abusion tenian, que la muger que co-
mia la mal que te habia pegado ata Ctla quan-
do coxia, nunca pariria, itor que te pegaria el
nino tenero del vientre, o fi parieste teria con
mucho trabajo, esto se llama Tan allí suert-
recho izquios, y alguno, lo creen ey cudia.
é DezCo, que para que la muger prChada pá
dieste andar de noche sin ver hizarrigua, [que
hetra lengua le llama stacate tractre, y li el fin
gularriacatio,y, ej era menester que tieneste
vo poco de ceniza en el teno, o en la ciertira
junto a la carne, y muchos ay que fexian en
poco de Ficiert, o Tabaco a la barriga, para
poder y r de noche leguros. " ' '
et Q.uando alguna muger yuas visitar á al-
guna rexien parida, y llevana fus hijuelos es
figo, en llegando á la cala de la parida y ua a-
l Ccócina y tomaas ceniza, o xores de corrar
en caũia Pedia.y con ella fregaba todas las
cora.uras de tus ninos, y las tienes, porque
decian que si ello no haxian aquellas criatu-
ras quedarian mancas deja, corosaras, y que
rodia estas cruzarian estando tas motissilen,
y a ello llaman moriacciozocasioi ya, que es
fregarte tas resistias cos, ceniza. ' ' '